Úlceras en las piernas ¿todas son úlceras vasculares?

Cuando hablamos de heridas en las piernas, con frecuencia las asociamos con úlceras vasculares, sin embargo no siempre es ésta la causa del origen de estas heridas.

Establecer un diagnóstico etiológico diferencial entre los tipos de heridas que nos encontramos en las piernas es fundamental para aplicar  el mejor tratamiento posible.

¿Cómo vamos a conocer las causas de estas heridas? Preguntaremos al paciente: ¿cómo se hizo esta herida?, ¿desde cuándo la tiene? y ¿cómo se ha curado hasta ahora? Con estas sencillas preguntas, averiguamos el origen de la herida, la evolución y los productos que ha utilizado para la curación. A partir de aquí ya empezamos a clasificar la herida.

Las más frecuentes son heridas traumáticas, que cuando se producen en pacientes con patología vascular pueden cronificarse y  pasar a ser úlceras vasculares.

Este es el ejemplo de un paciente con una herida traumática en la pierna con patología vascular que comenzó curándose en casa y que, tras una mala evolución, pasó a ser una úlcera vascular, en este caso venosa, con la consiguiente dificultad para su curación.

Los pacientes con patología vascular deben saber que cualquier herida traumática en las piernas debe ser tratada en su centro de salud lo antes posible, ya que si no se aborda adecuadamente el tratamiento de estas heridas con frecuencia derivan en úlceras vasculares.

Seguimos clasificando estas úlceras vasculares y lo haremos visualmente, valoraremos dónde se localizan estas úlceras , que tamaño tienen, cómo son los bordes de la úlcera y qué color tiene la piel perilesional.

Comenzamos a diferenciar las úlceras vasculares en venosas, isquémicas, neuropáticas e hipertensivas, para poder clasificarlas con certeza y con rigor tendremos que realizar una exploración de los pulsos pedio y tibial posterior; si los pulsos están presentes, nos dirige a pensar que son úlceras venosas, si los pulsos están disminuidos o ausentes, podemos pensar en patología arterial.

Origen de las úlceras vasculares

Para confirmar el origen de estas úlceras tendremos que realizar un Doppler, método de diagnóstico no invasivo para conocer el estado de la circulación arterial calculando el ITB (Índice Tobillo Brazo).

Realización de Doppler:

Tendremos que tener cuidado al interpretar los resultados del Doppler en pacientes diabéticos, ya que la frecuente presencia de calcificaciones en estos pacientes puede darnos resultados erróneos.

Con estas sencillas exploraciones que podemos realizar en Atención Primaria o en cualquier ámbito sanitario, podremos clasificar y conocer el origen de las heridas y úlceras de las piernas, aspecto fundamental para abordar un correcto tratamiento.

Hay otro tipo de úlceras que se localizan en las piernas y que se incluyen en úlceras mixtas pero que su etiología no es vascular, sino una enfermedad de base que padece el paciente como la HTA, artritis reumatoide, enfermedad de Crohn, enfermedad séptica como la enfermedad de Buruli o el pioderma gangrenoso, neoplasias como el Sarcoma de Kaposi o carcinomas. Su prevalencia es baja , entre el 0.5 – 1% de las úlceras de la extremidad inferior, afectan más al sexo femenino y el dolor es un síntoma constante. Estas son úlceras que se cronifican, difíciles de tratar, ya que inicialmente se tratan como úlceras vasculares pero tras una evolución tórpida nos hace sospechar que su origen sea otro. Para confirmar este diagnóstico suelen requerir consulta con Especializada e incluso ingreso hospitalario, donde se realizan las pruebas que confirmen el diagnóstico y el origen de la úlcera.

Como hemos visto, no todas las heridas que se localizan en las piernas son de origen vascular, pueden ser traumáticas (muy frecuentes en personas mayores), neuropáticas o asociadas a enfermedades sistémicas como el pioderma gangrenoso o neoplasias. En todas ellas el diagnóstico diferencial es fundamental para abordar su tratamiento con éxito.

Tenemos que tener presente que si no establecemos un diagnóstico diferencial precoz y tratamos adecuadamente la herida, cualquier lesión en la pierna de un paciente con patología vascular puede derivar en una úlcera que tendremos que tratar como vascular aunque su etiología inicial sea otro.

Bibliografía

1.- Marine-lo Roura, J. Úlceras de la extremidad inferior. Edit. Glosa. 2º Edición 2011.

2.- Documento de la conferencia nacional de consenso de las úlceras de la extremidad inferior. CONUEI (Conferencia Nacional de Consenso sobre Úlceras en Extremidad Inferior).

3.- Ulceras.net. Monográficos Ulceras vasculares.

4.-www.gneupp.info. Documentos de consenso.

5.- www.aeev.net.